Citroën ha confirmado el lanzamiento del E-Mehari, un nuevo modelo basado en el C4 Cactus que recupera el espíritu del popular y asequible todoterreno homónimo que causó gran sensación a finales de los sesenta, previsto para la primavera de 2016.
El E-Mehari, que se fabricará en la planta que Citroën tiene en Rennes (Francia), está siendo expuesto estos días en París con motivo de la celebración de la cumbre COP21, en lo que parece una declaración de intenciones de lo que quiere hacer la marca francesa de este nuevo modelo: un excursionista lúdico para el público joven que sea, además de asequible, respetuoso con el medio ambiente.
El concepto fue presentado en septiembre durante la última edición del Salón de Frankfurt, aún con el apellido Cactus M como denominación, pero entonces no se desvelaron las intenciones actuales de Citroën: ni que realmente pretendía llevarlo al mercado (parecía más un juego de referencias siguiendo las modas de lo vintage), ni mucho menos que se recuperara el espíritu del Méhari en forma de un más moderno coche eléctrico.
El E-Mehari, que ha simplificado (incluso podría decirse que infantilizado) sus líneas con respecto a las que mostraba el Cactus M, tiene carrocería descapotable sobreelevada (monta una capota móvil con ventanas transparentes), ofrece cuatro plazas y se puede seleccionar con cuatro colores de carrocería y dos de tapicería. Como espacio de carga, el maletero ofrece 200 litros de capacidad.
En su interior, el Citroën E-Mehari esconde un sistema de propulsión 100% eléctrico que desarrolla una potencia máxima de 67 caballos, la cual empuja al vehículo hasta una velocidad máxima de apenas 110 kilómetros por hora con una autonomía de 200 kilómetros.
Por último, el nuevo coche eléctrico de Citroën conserva algunas de las funcionales características de su predecesor: al igual que el Méhari original, el E-Mehari se puede lavar también con una manguera tanto por dentro como por fuera y mantiene el diseño de las puertas con ranuras.