Asegura estar muy contenta ante su nueva labor en el Ejecutivo. Isabel Celaá, exconsejera vasca (1949), capitaneará el Ministerio de Educación. Es profesora de profesión y ejerció de consejera de Educación, Universidades e Investigación en el Gobierno del PSE-EE, presidido por Patxi López, desde el año 2009 al 2012.
Lograr un Pacto Educativo que dé lugar a una nueva ley que sustituya a la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) será una de sus medidas estrella. De hecho, diferentes organizaciones de la comunidad educativa ya han pedido que se sustituya esta ley, que nació con toda la comunidad educativa en contra. Otro de los retos que tiene la nueva ministra será pactar el Estatuto Docente, que los sindicatos exigen desde hace años, instaurar un MIR Educativo y potenciar la Formación Profesional, sobre todo, la dual, un medio eficaz para la transferencia del conocimiento entre los centros educativos y las empresas. Estas mismas organizaciones destacan el "talante dialogante" y "conocimiento profundo" del sistema educativo de la próxima ministra. Celaá aseguró ayer que hay "una ventana de oportunidad abierta para el país". A su juicio, "hay una nueva perspectiva" en la que "todo el mundo parece más alegre". Es licenciada en Filosofía, Filología Inglesa y Derecho vinculada a la cultura irlandesa, ya que vivió en Belfast y Dublín, comenzó sus responsabilidades institucionales en materia de educación en 1987, para posteriormente ocupar, en el Parlamento Vasco, cargos de vocal en la Comisión de Agricultura y Pesca, así como en la Comisión de Sanidad y en la Comisión de Educación y Cultura, entre otros puestos. Impulsó la reforma de la Educación Pública Vasca, apostando por el trilingüismo y la incorporación de nuevas tecnologías en centros escolares, mediante el programa Eskola 2.0. Fue elegida presidenta de la Comisión de Ética y Garantías del PSOE en el Congreso Federal que en julio de 2014 ratificó a Pedro Sánchez como secretario general, en sustitución de Alfredo Pérez Rubalcaba y repitió en ese cargo en el congreso celebrado en junio del año pasado. Celaá tenía el cometido de interpretar los estatutos, tramitar los expedientes disciplinarios de militantes que hayan podido incumplir las reglas y resolver los litigios surgidos entre los órganos del partido entre sí y con los afiliados. Una de las novedades en esta legislatura es que Pedro Sánchez ha querido recuperar la esencia de la primera legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero. Una remodelación ministerial que está marcada por una reorganización de competencias, donde Educación ha perdido la pata de Universidad (que pasa a depender de Ciencia e Innovación, liderado por Pedro Duque). Por ello, la comunidad educativa ya ha pedido que haya una máxima colaboración entre ambos ministerios.