Banca y finanzas
'Clientes incógnito': una nueva forma de supervisar las oficinas bancarias
- Gobierno otorga mayores facultades de supervisión a la CMNV
- "Ante el incremento de la actividad en los mercados financieros"
- Se podrán elaborar guías técnicas de aplicación de la normativa
El Gobierno ha reforzado la capacidad de supervisión de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con la técnica del 'mystery shopping' (cliente de incógnito), consistente en enviar a agentes que, sin previo aviso, visitarán las oficinas de las entidades bancarias con la intención de detectar posibles incumplimientos en normas de conducta. Un manual que guiará las tareas de supervisión
En el proyecto de ley de Fomento de la Financiación Empresarial aprobado por el Consejo de Ministros, el Gobierno otorga mayores facultades de supervisión, inspección y sanción a la CNMV, "ante el incremento de la actividad en los mercados financieros".
El organismo encabezado por Elvira Rodríguez podrá elaborar guías técnicas de aplicación de la normativa y será la autoridad competente en la autorización y revocación de las entidades que operan en el mercado de valores, así como para la aplicación de sanciones.
500 millones para operar en el MAB
El proyecto aprobado además fija un techo de capitalización de 500 millones de euros para operar en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB), a partir del cual las sociedades cuyas acciones cotizan en el MAB han de solicitar la admisión a negociación en un mercado regulado.
Así pues, estas empresas quedarán automáticamente vinculadas por las normas de gobierno corporativo y demás requisitos de transparencia propios de este mercado.
Para potenciar el MAB, se elimina por un periodo transitorio de dos años la exigencia de la declaración intermedia de gestión (a mitad de semestre), y se permite que las empresas no presenten el segundo informe semestral, que no es exigible por normativa de la UE.
Incremento del seguimiento
Asimismo, se incrementa la labor de seguimiento que realiza la CNMV sobre estos mercados alternativos. Para ello, se exigiría a la entidad rectora que, con periodicidad trimestral, reporte a la CNMV las actuaciones concretas que está llevando a cabo para supervisar el correcto funcionamiento del mercado.