Banca y finanzas

El accionista de Sabadell perdería hoy un 7,32% si va a la opa, pero el diferencial cae a la mitad


Eva Contreras

El principal termómetro sobre las posibilidades de BBVA de sacar adelante o no la opa a Sabadell es el diagnóstico de la bolsa sobre sus estrategias y las expectativas en el desenlace de operación. Los accionistas del vallesano perderían hoy un 7,32% de tener que aceptar su canje o el equivalente a unos 1.228,75 millones de euros, pero el diferencial sobre la oferta se ha reducido a la mitad desde el máximo marcado a finales de julio. El grupo presidido por Carlos Torres propone entregar un título del banco vasco y 0,70 euros por cada paquete de 5,3456 acciones del banco catalán -esta última relación subirá a 5,5483 acciones cuando la entidad presidida por Josep Oliu abone los 0,07 euros por dividendos el próximo día 29, por el obligado ajuste técnico-.

La cotización de ambos finalizó este jueves en 15,50 y 3,27 euros, y eso implica que Sabadell vale un 7,32% más de lo que pagaría el banco vasco. La oferta inicial de BBVA lanzada el 9 de mayo de 2024 incluía un premio o prima positiva del 30% sobre la cotización que ambas entidades tenían el 29 de abril, víspera de que se filtrarse su interés, y desapareció en gran parte nada más plantear la oferta. En su momento, el canje valoraba a Sabadell en unos 12.000 millones y gracias al rally experimentado por ambas entidades después, en línea con el sector bancario, hace que hoy el vallesano alcance un valor bursátil superior a los 16.741,58 millones.

El empuje de la entidad vallesana en el parqué le ha permitido, de hecho, cotizar por encima del canje desde el pasado mes de enero y la brecha llegó a abrirse hasta un 14,43% máximo el pasado 22 de julio. Esta diferencia es la razón que esgrime la cúpula del banco catalán para argumentar que la oferta no valora adecuadamente la entidad, y la que arguyen los analistas para albergar la expectativa de que BBVA acabará subiendo el precio en el último momento si quiere garantizarse el éxito, salvo que se retire antes, porque difícilmente un inversor venderá sus acciones a menor precio.

Firmas como Deutsche Bank, o Alantra estiman, incluso, que el grupo vasco tendría que añadir 2.000 millones en efectivo para persuadir al inversor. Sin embargo, el mercado cotiza cada movimiento en la pautada y, a veces también sorpresiva, estrategia que han desplegado ambos contrincantes. Si la semana pasada la noticia era que el descarrilamiento era total y absoluto entre lo que el mercado estaba comprando en torno a la opa y lo que ofrecía BBVA por Sabadell, en los últimos días los inversores están ajustando el canje comprando más acciones de la vasca que de la catalana.

El punto de inflexión fue el inesperado adelanto por parte de BBVA de los objetivos financieros para su plan estratégico 2025-2028. Su previsión es ganar 48.000 millones de euros en los cuatro años y destinar 36.000 millones a remunerar al inversor vía dividendos o recompras de acciones. Su intención inicial era desvelar las grandes cifras de su nueva hoja de ruta tras el desenlace de la opa para poder incluir -o no- al Sabadell en las proyecciones. Su cúpula explicó su publicación por adelantado para que el inversor pudiese conocer el potencial y el valor intrínseco de la estrategia de BBVA en solitario, con independencia de lo que acabe ocurriendo con la opa.

Sabadell había desvelado escasos días antes su proyección de ganar 1.600 millones al término de su plan 2025-2027, y destinar 6.300 millones a remunerar al inversor. Las diferencias responden también al dispar tamaño de ambas entidades, pero en ambos casos comprometen una rentabilidad al inversor cercana al 15% anual.

Los números de BBVA, sin embargo, han supuesto una sorpresa positiva inesperada en el parqué que ha ayudado a remontar a su cotización y cerrar a la mitad la brecha de la capitalización bursátil del vallesano frente a lo que le tocaría cobrar a sus accionistas con el canje ofertado por el vasco.

Ese mismo día presentaba resultados y sorprendía con un beneficio de 5.447 millones de euros entre enero y junio, que rebasa en un 9,1% el contabilizado un año antes y dejaba pequeño el alza del 0,5% esperada por el mercado. El parqué aplaudió las cuentas con una revalorización del 8% en la cotización, mientras que Sabadell lo hizo un 4,35% y el resto de bancos registraron caídas, cosechando en esa jornada buena parte de la remontada que ha ayudado a cerrar el gap con el canje.

El banco británico Barclays estima en un informe publicado este jueves que la entidad tiene margen económico para subir la contraprestación en la opa, aunque también considera que retirar la oferta generaría valor.

"Esperamos que BBVA sea disciplinado en el acuerdo con Sabadell: cualquier decisión se comparará con el retorno del 12% o 13% de las recompras, y tanto una fusión con buen precio como una retirada serían positivas en valor", concluyen sus analistas. La firma ha mejorado su previsión y asignado un precio objetivo de 18 euros, muy superior a los 15,50 con que cerró la sesión.