El anunciado adiós de Deliveroo en España -al que todavía falta por poner fecha definitiva- ha provocado que arranquen los "juegos del hambre" entre sus competidores en el sector del envío de comida a domicilio, sabedores de que hacerse con ese "trozo de pastel" inclinaría la balanza a su favor y les permitiría dar un golpe casi definitivo.
