El índice Nikkei ha cerrado la sesión con una caída del 0,15%, hasta los 9.435,01 puntos, lo que refleja a la perfección la igualdad existente dentro del intenso debate que tiene lugar en el índice japonés, entre aquellos que siguen apostando por mayores subidas y por los que venden pensando que un escenario de mayores caídas es el más probable en próximas sesiones.