Se topó el Ibex 35 contra la última directriz bajista que puede desplegarse en un gráfico diario para dejar una vela que, combinada con la del pasado viernes, sugiere techo.
Situación de corto plazo:
La dimensión del mismo, como pasa siempre con las velas, es algo que nos es completamente desconocido; pero no nos extrañaría nada que se trate de un techo a muy corto plazo y que las ventas no tengan que llevarnos muy más debajo de lo que ayer lo hicieron. De hecho, el volumen negociado, el más bajo en muchos días, pone claramente de relieve que en realidad no ha habido ninguna clase de presión bajista a considerar como amenaza respecto del movimiento que nacía hace días desde el soporte clave de largo plazo, en los 13.500/13.600 puntos. Las ventas responden a la sobrecompra de muy corto plazo que genera, necesariamente, un alza vertical como la que estamos viviendo.
Situación tendencial:
El hueco alcista dejado tras el recorte de tipos en Estados Unidos es, desde luego, un nivel que no debería perderse si el mercado ha hecho un suelo sostenible en tendencia. La directriz bajista ha caído y eso devuelve a la neutralidad en el corto plazo al mercado, con cierto sesgo alcista. Tendencia clara, como venimos comentando, sólo existiría por encima de los 15.600 o por debajo de los 13.600 puntos; dentro de esa gama habrá que seguir bregando entre irregularidad, idas y venidas, y stops que saltan en falso.