Buscar

Se acabó el rebote en Nueva York y se abre el camino para más descensos

Bolságora
1/08/2007 - 0:27

El Dow Jones vuelve a hundirse por la posible quiebra de una financiera atrapada en la crisis 'subprime'. Se acabó lo que se daba. Wall Street intentó prolongar ayer el rebote del viernes y el lunes, pero a media sesión se quedó sin fuerzas. Y en la última hora se vino abajo con estrépito de nuevo.

Al final, nuevo batacazo del 1,1% para el Dow Jones, hasta 13.211,99 puntos. El S&P 500 se dejó más todavía, el 1,26% hasta 1.455,27, y el Nasdaq se llevó la palma con un desplome del 1,43% hasta 2.546,27. El saldo mensual en julio es de una caída del 1,5% para el Dow, del 3,2% para el S&P y del 2,2% para el Nasdaq.

Así pues, hay que dar por concluido el rebote, como por otro lado era de esperar; ya les habíamos avisado en los últimos días de que no había que dejarse engañar por los que decían que la caída había terminado. Mientras no tuvieran pruebas para apoyar esa previsión, lo más probable era una continuidad bajista, tal como se confirmó ayer. Ahora se abre el camino a descensos muchos más pronunciados. Y va a resultar muy difícil que los mercados europeos mantengan su rebote con este panorama en EEUU.

El optimismo inicial se debió a los benignos datos de inflación -el índice de precios de gasto de consumo, el PCE, cayó al 1,9% interanual en tasa subyacente, algo que no se veía desde 2004- y a los resultados de General Motors –que volvió a beneficios inesperadamente, lo que hizo subir con fuerza al valor en la apertura-.

Pero esta alegría dio paso a nuevos temores sobre el mercado de crédito. El detonante fue el reconocimiento de American Home Mortgage de que ha incumplido los coeficientes de solvencia. Algo que abre la posibilidad de que entre en quiebra, la primera de una financiera atrapada en las hipotecas 'subprime'. La acción de despeñó un 90%.

En el campo empresarial, otra financiera, IndyMac, anunció una caída del 57% debida a esta crisis. Fuera del sector, Alcatel-Lucent publicó unas pérdidas mayores de las esperadas, lo que le costó un batacazo del 12,5%. Finalmente, se confirmó la venta de Dow Jones a Murdoch, por lo que el valor se disparó el 11,3%.

Tampoco ayudó a la renta variable la nueva escalada del petróleo, que superó los 78 dólares. Los bonos volvieron a actuar de refugio: subieron en precio y su rentabilidad cayó al 4,77%. El dólar apenas se movió frente a un euro que terminó en 1,3699 dólares.