La tasa de desempleo de Alemania cayó en enero a su nivel más bajo en cinco años debido al crecimiento económico del país y a la actividad constructora. El número de parados retrocedió en 106.000 personas, frente a unas previsiones de 40.000, lo que deja la tasa en el 9,5% en el mes de enero frente al 9,8% registrado en diciembre, la más baja desde abril de 2002. Por su parte, la tasa de desempleo en Francia se situó en el 8,6% en diciembre, por debajo de lo esperado. El consenso del mercado esperaba que el paro en el país galo se mantuviera en el 8,7%. Estos datos se van a reflejar en una subida de la confianza de las familias.