Jornada impresionante, con el Ibex 35 como faro del resto de plazas. De forma más o menos inexplicable, su fortaleza es algo que parece querer apoyar la tecnología norteamericano en un mercado que, globalmente, ha llegado a zonas de soporte. Bastó el apoyo de Wall Street para que nuestra bolsa volviera a la carga después de haber vivido un potente reversal matinal de la mano de las ventas que en todo momento recorrieron las bolsas europeas. El patrón dejado en zona de resistencias, de tipo hombre colgado, pide sin embargo precaución a los alcistas en zona de altos del rally iniciado en marzo.