El gigante eléctrico alemán, firme pretendiente de Endesa, ganó un 17,8 por ciento más en el primer trimestre del año alcanzando un beneficio neto de 1.720 millones de euros que ha superado las previsiones de los expertos, que auguraban una cifra promedio de 1.560 millones. La reciente consolidación de las cuentas de sus filiales de Bulgaria y Rumanía han resultado decisivas, al igual que el aumento de los precios de la electricidad y la fuerte demanda de gas por el frio invierno. A estas horas sus acciones suben ligeramente, un 0,17 por ciento, colocándose en 94,31 euros por acción.