Al igual que hay analistas siemprealcistas, también hay siemprebajistas en el mercado, aunque son muchos menos y suelen ir por libre. Ninguna firma tolera un error continuo en un análisis bajista aunque sí lo hacen cuando la equivocación es al alza. Por eso, es noticia que uno de ellos se haya convertido a la religión alcista que domina completamente el mercado actual.
Sobre todo, porque su conversión se basa en el giro de varios indicadores técnicos relevantes.
Se trata de Norman Fosback, un estudioso del mercado de valores que en los años 70 fundó un instituto de análisis econométrico y que editaba varias publicaciones de inversión que vendió a Time Warner en los 90. Desde entonces, edita un newsletter llamado Fosback's Fund Forecaster, cuyas predicciones están basadas en un modelo econométrico que incorpora gran cantidad de indicadores, tanto fundamentales como técnicos.
Desde hace algún tiempo, su modelo arroja un resultado moderadamente bajista. De hecho, este verano predecía que el mercado norteamericano sufriría una pérdida en los siguientes 12 meses y que subiría un magro 13% en los próximos cinco años, un 2,5% anual (por debajo de cualquier fondo monetario).
Sin embargo, en el último número de su newsletter, su modelo proyecta una subida del 11% en el próximo año y del 38% en los próximos cinco (lo que equivale al 6,7% anual). Aunque tampoco es para tirar cohetes, supone un cambio radical en un período muy corto. Este tipo de giros bruscos en los modelos econométricos suelen producirse en momentos de brusca caída del mercado, lo cual no es evidentemente el caso.
¿Qué ha provocado esta mejora de las previsiones de Fosback? No han sido los indicadores de valoración del mercado, que él sigue considerando indicios bajistas, ni tampoco los indicadores monetarios. La culpa la tienen los indicadores técnicos, en concreto tres de ellos. Uno es la profundidad del mercado medida por la diferencia diaria entre el número de valores que suben y el de los que bajan. "Estaba bastante débil este verano, pero ahora está más fuerte que nunca", asegura este analista.
Otro indicador conocido que ha mejorado notablemente desde el verano es la fuerza relativa de los valores pequeños respecto a los grandes. Pero el que más importante le parece es uno poco conocido de su invención: el High Low Logic Index. Este indicador es bajista cuando hay un gran número simultáneamente de valores en máximos de 52 semanas y en mínimos de 52 semanas. La lógica es que, en condiciones normales, o hay muchos valores en máximos (en las tendencias alcistas) o en mínimos (en las bajistas), pero no las dos cosas a la vez. Y cuando eso ocurre, el mercado tiende a caer. Este índice "ha mejorado drásticamente desde principios de año y se acerca a una señal de compra".
En todo caso, Fosback tampoco se ha vuelto eufórico, puesto que un 6,7% anual está por debajo de la media histórica de la bolsa norteamericana y no es muy superior a la rentabilidad de los bonos. Pero un giro de este calado en un analista que lleva tanto tiempo en el mercado -y que vive de acertar, no de equivocarse como la mayoría- suele significar algo. No conviene ignorarle.