
Con el mercado cada vez más cerca de llegar al ecuador del año, son dos los asuntos clave que marcarán el devenir del año en la renta variable. En el Viejo Continente queda un mes para que el Reino Unido decida si abandona la Unión Europea o no -de hecho, en la reunión del G-7 en Japón ha sido definido como uno de los mayores riesgos en el horizonte-. Después de que se conozca si se produce el Brexit -y en qué condiciones- todas las miradas se girarán al otro lado del Atlántico. Y es que el segundo martes de noviembre se celebrarán las elecciones en Estados Unidos y la gran amenanza viene del candidato del bando republicano, el multimillonario Donald Trump.
Si la situación se complicase, el suelo que encuentra el Ibex está en los 7.700 puntos, mínimos del año, mientras que su techo está en torno a los 9.500 puntos. Con un margen de subida del 9 por ciento y del 12 por ciento de caída, la ecuación rentabilidad/riesgo tiene cierto atractivo, por lo que realizamos una selección de valores para poder meterle un gol al mercado. Dentro de las estrategias de elEconomista, seleccionamos las compañías con mejor recomendación, formando una cartera cuyo objetivo es superar al mercado y cuya evolución será auditada y contada.
El Eco10 logra batir en más de 2 puntos porcentuales al Ibex 35 en 2016 e IAG se sitúa como la firma más atractiva para los analistas -además, la aerolínea también forma parte de la cartera del Ecodividendo, del Eco30 y elMonitor-. El Top 10 por fundamentales de Ecotrader también logra superar al selectivo español desde su creación, siendo la principal estrella Cie Automotive. Dentro del Ecodividendo -que avanza un 5 por ciento desde su inicio, en 2006, y se deja algo más de un 4 por ciento este año- Acciona se erige como la mejor opción dentro de sus componentes -por detrás de IAG-. El Eco30 está teniendo un año complicado, al perjudicarle la revalorización del euro. Aún así, dentro del selectivo se encuentran valores de calidad como Delta Air Lines.
Mientras, elMonitor también está teniendo una primera mitad de 2016 difícil y se ve batido por el mercado americano, si bien está empatado con Europa: la mejor opción dentro de la cartera es Alphabet.
Antes del 'Brexit', IAG tiene el mayor potencial
Si hay una empresa del Ibex que tiene conquistadas ahora a las casas de análisis, esa es IAG, el valor con la mejor recomendación de compra del índice y que forma parte del Eco10. Las acciones de la aerolínea, sin embargo, son unas de las más penalizadas en mercado en el año, al caer un 19,5 por ciento. Pero se acerca una flecha clave: el 23 de junio. La posibilidad de una votación a favor de la salida de Reino Unido de la UE está pesando sobre el título y precisamente ese día puede cambiar su suerte.
Si el Brexit "se resuelve favorablemente [en contra de una salida] debería actuar como claro revulsivo en el valor", apuntan los analistas de Banco Sabadell. Las firmas de inversión confían en una fuerte recuperación del título, ya que, de hecho, es la compañía del Ibex con más potencial alcista según los precios objetivos del consenso de mercado. La aerolínea cuenta con un recorrido al alza del 43 por ciento, hasta recuperar el entorno de los 9,6 euros. Hay 11 casas de análisis que prevén incluso que vuelva a cotizar por encima de 10 euros, desde los 6,66 actuales.
La propia IAG, en la que Qatar ha incrementado su participación esta semana, ya avanzó que los resultados del segundo trimestre se verían afectados por los ataques de terrorismo en Bruselas y por una debilidad de la demanda premium. Los últimos datos de tráfico, de abril, ya apuntaron a un freno por esto último, aunque también hubo un impacto por la Semana Santa (este año fue en marzo). Pese a ello, los expertos prevén que concluya el año con un beneficio neto de 2.260 millones, un 51 por ciento más que el año pasado. Y confían en una mejora del 13 por ciento para el próximo ejercicio.
Uno de sus mejores aliados estaba siendo el petróleo, que desciende un 27 por ciento en el último año en el caso del barril europeo, aunque la recuperación actual del precio del Brent, que vuelve a superar los 48 dólares, "elimina uno de sus vientos de cola más significativos", señalan en Credit Suisse.
Más retribución al accionista
Las buenas expectativas de beneficio y, sobre todo, de generación de caja y reducción de deuda llevan a algunos analistas a esperar mejoras de la retribución. "La generación de caja será más fuerte de lo presupuestado para este año. (...) Seguimos pensando que es probable un dividendo especial", consideran los analistas de Barclays, que recuerdan que la compañía explicará sus planes en el Capital Markets Day que celebrará en noviembre. En esta misma línea coinciden los expertos de Citi, que destacan en un informe que ante la falta de adquisiciones esperan que la aerolínea reduzca su deuda a prácticamente cero a finales de 2017 y que en 2018 logre una caja neta de 1.500 millones. Por ello, estiman que IAG podría combinar compras selectivas con más retribución al accionista en los próximos tres años.
De momento, los inversores recibirán el próximo dividendo de la compañía el 4 de julio y, tras la caída de la acción, el pago de 0,1 euros por acción ya ofrece una rentabilidad del 1,5 por ciento. Para el conjunto de 2016, el consenso de bancos de inversión prevé un rendimiento total del 4 por ciento.
Acciona, entre los mejores pagos de julio
Por primera vez desde la reforma eléctrica, Acciona es un valor que el consenso de mercado recomienda comprar. Es, junto a IAG, uno de los valores que aconsejan adquirir los analistas entre las empresas que componen actualmente el EcoDividendo, la estrategia de elEconomista que recoge los pagos próximos más interesantes de la bolsa española.
La compañía ha pasado de tener que cancelar su retribución al accionista por la reforma del sector en España a ofrecer una de las más elevadas que el inversor puede cazar en el mes de julio. Su pago de 2,5 euros es un 25 por ciento superior al del ejercicio anterior, aunque todavía inferior a los más de 3 euros que llegó a abonar Acciona antes de verse obligada a cancelarlo. El dividendo, que se pagará el próximo 1 de julio, ofrece una rentabilidad del 3,8 por ciento.
Este pago también es más atractivo gracias la caída de la acción. El título pierde un 16,5 por ciento en 2016, siendo uno de los más bajistas del Ibex en el año. "El valor no ha sido castigado por noticias relevantes. Actualmente está soportando los niveles en torno a los 65 euros y, con un volumen de negociación bajo en la caída, podemos pensar que se están realizando compras. Vemos verdadero potencial para llegar a los 80 euros por acción donde tiene su máximo anual", opina Álvaro García-Capelo, analista de XTB. El consenso de mercado coincide en que también se acercará de nuevo a ese nivel.
Otro de los atractivos de Acciona es que tiene por delante años de fuerte crecimiento en beneficios, después de las pérdidas a las que le condujo la reforma energética en 2013. Pese a que lejos quedarán las ganancias previas a la crisis, los bancos de inversión estiman una mejora del 44 por ciento en el beneficio neto para los dos próximos años, muy por encima del sector. Buena parte de este crecimiento vendría derivado de una nueva etapa de inversiones que ya ha adelantado el grupo.
Cómo afectarán sus planes a la deuda
Acciona anunció este mes su intención de realizar inversiores por un valor entre 600 y 700 millones de euros este año y espera mantener este ritmo hasta 2020, por lo que en total rondarían los 3.500 millones en cinco años. Las renovables, que sigue siendo la división que más aporta al beneficio, abarcarán la mayor parte, alrededor de 2.000 millones, según avanzó el presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, en la última junta.
¿Cómo afectará esto al endeudamiento del grupo? Pese a estos planes, los analistas esperan que reduzca ligeramente su deuda en los próximos años. En el primer trimestre, la cifra se elevó hasta los 5.369 millones debido, según explica la compañía, a que en la primera parte de 2016 se concentró "la mayor parte de las inversiones previstas para el año entero". Ese trimestre "no es extrapolable a próximos periodos", señala un informe de CaixaBank. El consenso de mercado estima que la deuda se quede en 5.277 millones a cierre del ejercicio y que se reduzca hasta 5.100 en dos años. Esto supondría que la ratio de endeudamiento pase de 4,6 veces el ebitda de este año a 4,06 veces en 2018.
La eficiencia le deja a Delta un 'vuelo' del 44%
Si tuviésemos que elegir un valor del Eco 30, este sería Delta Air Lines. El pasado jueves Fitch elevó su rating sobre la aerolínea americana a BBB-, otorgándole -al igual que Moody?s- el grado de inversión. Desde la entidad justificaron esta mejora por "los progresos en el desapalancamiento y su generación de cash flow". Solo S&P sigue considerando la deuda de la compañía como basura y en JP Morgan apuestan porque cambiará su rating dentro de poco. Los analistas creen que la compañía debe recuperarse en bolsa gracias a su eficiencia dentro de un sector que no se espera que crezca: en el periodo 2016-2018 se prevé una caída del beneficio de las aerolíneas tradicionales de 6 por ciento.
Una de las fortalezas de la firma es su rentabilidad: el consenso de mercado espera que Delta Air Lines convierta en beneficio neto este año 12,2 dólares de cada 100 que ingrese, lo que supone una ventaja de 4,3 puntos porcentuales frente a sus principales competidoras, una distancia que se ampliará hasta los 4,6 puntos el próximo ejercicio. "Delta es la firma más rentable de las tres aerolíneas tradicionales, ya que ha sido la única que ha integrado completamente su fusión [en 2008 recibió la aprobación de las autoridades para absorber Northwest Airlines]", explican desde Cowen, a la vez que resaltan que "su red y su presencia en Nueva York han permitido a la compañía robar cuota de mercado al resto de la industria".
Precisamente esta capacidad ha permitido a la compañía mejorar su dividendo hace solo unos días. Por tercer año consecutivo la aerolínea ha incrementado su retribución en un 50 por ciento y repartirá 81 centavos por título, lo que supone una rentabilidad a precios actuales del 1,9 por ciento. Además, la compañía tiene previsto recomprar 3.000 millones de dólares en acciones durante los próximos doce meses. Así, adquirirá 1.000 millones en el segundo trimestre de 2016 y 540 millones por trimestre hasta mayo de 2018. Desde Raymond James consideran que estas acciones "señalan la convicción creciente de la empresa en la sostenibilidad de sus ganancias durante el ciclo de negocio".
"Con la rentabilidad de Delta mejorando, esperamos que la compañía siga manteniendo su disciplina de gastos en bienes de capital (capex), lo que le permitirá incrementar sus dividendos al tiempo que los beneficios mejoran y recompra acciones de manera agresiva", concluyen desde Cowen. Con la decisión de distribuir 0,81 dólares por título la empresa batió todas las expectativas del mercado -se esperaban 0,54 dólares-. Si la compañía continuase elevando su retribución al mismo ritmo los pagos con cargo a 2018 ofrecerían un rendimiento del 4,2 por ciento.
En este contexto, según los datos de Bloomberg, de los quince analistas que siguen a la compañía catorce recomiendan adquirir sus títulos y solo uno aconseja mantenerlos. De este modo, fijan su precio objetivo en los 62,2 dólares, lo que supone un recorrido al alza del 44 por ciento.
En caso de alcanzar las expectativas de los expertos, la aerolínea se situaría muy por encima de sus máximos históricos de los que se queda actualmente un 17 por ciento por debajo.
Una apuesta segura: la innovación de Alphabet
Si hay una apuesta clara en bolsa por parte de los analistas internacionales es por Alphabet, la empresa técnicamente perfecta si se atiende a su modelo de negocio. Un beneficio neto creciente a ritmo de doble dígito, unos flujos de caja que no desfallecen y una situación de tesorería envidiable hacen de la otrora Google una de las empresas que tiene una recomendación de compra más sólida del mundo y, por ende, de la cartera de elMonitor.
La confianza de las casas de inversión en ella no caduca. Desde 2005 no ha dejado de recibir una recomendación de compra por parte de los expertos que la siguen. Ahora, según los datos de FactSet, un 91 por ciento de ellos recomienda tomar posiciones en una firma a la que le otorgan un potencial alcista superior al 25 por ciento de cara a los siguientes doce meses. "Creemos que la valoración actual sigue siendo atractiva", señalan desde JPMorgan.
La clave del éxito de esta compañía que capitaliza 486.000 millones de dólares -rivaliza con Apple por ser la firma cotizada más grande del mundo- radica en su capacidad para innovar y diversificar. La mejor muestra de ello es la reciente apuesta de la firma fundada por Sergey Brin y Larry Page por la inteligencia artificial y el aprendizaje de máquinas.
Google Assistant, un asistente personal virtual, y Google Home, un dispositivo de escritorio que se activa por voz son los nuevos ases que los ingenieros de la compañía se han sacado de debajo de la manga para seguir elevando el peso de los ingresos procedentes de ambitos diferentes a la publicidad en la web.
Y no son los únicos. Los coches sin conductor, el lanzamiento de aplicaciones para que los usuarios compartan automóviles en Estados Unidos, sus termostatos inteligentes o sus servicios en la nube ejemplifican la agilidad de Alphabet a la hora de abrir nuevas vías de negocio.
Los inversores la respaldan
Jitendra Waral, analista de Bloomberg, asegura que la compañía estadounidense "ahora está apostando por liderar los sistemas de traducción y por el big data (gestión masiva de datos)", mientras que desde el departamento de análisis de JP Morgan indican que sus fundamentales se mantienen fuertes y que seguirá siendo uno de los principales beneficiarios del cambio secular que supone el pago en internet". Y todo ello lo saben premiar los inversores.
En seis de las últimas ocho ocasiones en las que dio a conocer sus resultados trimestrales, los inversores reaccionaron comprando acciones de la compañía. De hecho, de media sus títulos se revalorizan cerca de un 5,5 por ciento cada vez que rinde cuentas con el mercado.
No es de extrañar a tenor del comportamiento de sus acciones en el mercado de renta variable en los últimos ejercicios. Sus acciones han registrado subidas de un 19 por ciento de media en los últimos 10 ejercicios. Por ello, es una de las 50 firmas que más ha crecido en bolsa en el S&P 500 en los últimos 10 años al multiplicar su precio por 4 en la última década.
La joya de la que todos hablan: CIE Automotive
Si IAG es la compañía del Ibex 35 que recibe la aprobación de los analistas, CIE Automotive es su réplica en el Mercado Continuo. El grupo industrial de componentes para el sector de la automoción aparece allá donde se pregunte por un idea de inversión atractiva entre las cotizadas de tamaño medio de la bolsa española. Y no se trata de una moda pasajera. La empresa ostenta el meritorio récord de recibir la recomendación de compra más longeva de todo el parqué nacional. El consenso de mercado aconseja adquirir sus acciones desde el 11 de abril de 2013.
Su popularidad entre los bancos de inversión se extiende a las principales gestoras españolas y a otras extranjeras. Según datos de FactSet, el 15,4 por ciento del capital de CIE Automotive está en manos de inversores institucionales, entre los que destacan Santander AM (controla un 3 por ciento del grupo), Amber Capital (otro 3 por ciento) o Bankinter Gestión de Activos (1,1 por ciento).
El respaldo recibido ha sido recompensado por la compañía industrial con las 3 veces por las que ha multiplicado el valor de sus acciones hasta los 15,5 euros a los que cotizan actualmente, desde los 5 euros a los que lo hacían hace tres años. "Una de las principales fortalezas de CIE Automotive es su equipo gestor, que cuenta con un historial muy bueno de creación de valor para el accionista", destaca Álvaro Arístegui, analista de Ahorro Corporación, quien añade la política de adquisiciones como otro de los grandes aciertos del grupo vasco.
Este abril, CIE Automotive sacó a bolsa a su filial tecnológica Dominion por medio de una OPS (oferta pública de suscripción) asegurándose el control del 50,01 por ciento. Una operación con la que captó 150 millones de euros y que fue aplaudida por los principales accionistas de la compañía pese a no recibir títulos. Es el caso de Albert Fayos, gestor de EDM, quien confesó que "valoraba positivamente la salida a bolsa, ya que los recursos captados sirven para reforzar el balance y acometer nuevas compras". En las siguientes semanas, el grupo ha anunciado dos adquisiciones, la de Century Plastics y la de Industrias Amaya Tellería, por 69 y 186 millones de euros, respectivamente.
Estas operaciones encajan con el plan estratégico planteado para 2020 por la compañía, que quiere "aprovechar las oportunidades de integración", con el límite de no incrementar la deuda neta por encima de 2 veces el ebitda (beneficio bruto de explotación). Una premisa que los analistas esperan que cumpla tanto este año, como el que viene.
El objetivo de CIE Automotive es que las nuevas adquisiciones sirvan para duplicar beneficios en 2020. Un hito que ya consiguió en 2015, cuando ganó 129 millones de euros, respecto a los 60 millones que registró en 2013. "El crecimiento que presenta la mantiene a un PER (veces que el beneficio está recogido en el precio de la acción) atractivo", incide Álvaro Arístegui, de Ahorro Corporación. "Cuenta con un buen modelo de negocio: diversificado geográficamente y tecnológicamente, algo poco habitual en el sector, aunque es una compañía cíclica que está expuesta a los vaivenes de la economía global", concluye el analista.