El valor se desploma casi el 9% en el after hours. Yahoo cumplió ayer la tradición de dar unos resultados peores de lo esperado. Lo hizo con las cuentas del cuarto trimestre y se hundió en bolsa.
Lo hizo con las del primero de 2006 y subió el 4% porque el mercado se temía algo aún peor; y lo hizo ayer con las del segundo trimestre del año, y se dio un batacazo del 8,75% hasta 29,42 dólares.
La decepción en este caso vino de los ingresos, que subieron el 28% en términos netos (excluyendo lo que Yahoo paga a sus socios por generar tráfico hacia su web) hasta 1.120 millones de dólares, cuando el mercado esperaba 1.140. Los beneficios sí estuvieron en línea con las previsiones: 164 millones de dólares, 11 centavos por acción.
Al analizar las cuentas, se llega a la conclusión de que Yahoo está acusando duramente en EEUU la competencia de su gran rival, Google, y de algunos sitios más pequeños. Además, dio unas previsiones de futuro acordes con las de los analistas, aunque poco alentadoras para pensar en una recuperación del negocio: para 2006 entero, espera unos ingresos de entre 4.600 y 4.850 millones, frente a los 4.780 del consenso del mercado.
Con estas cuentas, se desvanecen –al menos a corto plazo– las esperanzas de que los inversores recuperen la confianza en Yahoo. El valor ya arrastraba una pérdida del 18% en el año antes del batacazo de anoche, frente a la caída del 8% del Nasdaq y a la del 1% de Google. Habrá que ver cómo afectan estos resultados hoy al Nasdaq después del rebote de ayer al cierre; no parece que el efecto vaya a ser muy positivo.