El Banco de Inglaterra ha anulado hoy una de sus políticas de expansión monetaria para frenar el crecimiento de los créditos hipotecarios, lo que ha disparado a la libra hasta máximos.
El gobernador del Banco de Inglaterra (BoE), Mark Carney, anunció esta mañana la supresión de su programa de financiación a bancos y sociedades de crédito (FLS, por sus siglas en inglés) impulsado en 2012 con el objetivo de facilitar la circulación del crédito. El temor de las autoridades de que el país esté recorriendo, una vez más, el camino hacia una burbuja inmobiliaria ha impulsado a la entidad a tomar la primera medida de contracción monetaria.