Como hace pocos meses, un patrón de cabeza y hombros invertido (hchi) desplegado y confirmado por Sacyr ha generado notables beneficios a la operativa abierta por Bolságora en no muchas sesiones.
Con el alza de hoy, que ha llevado a la empresa a zona de resistencia clave en una subida vertical, llega el momento en que el inversor debe tomar su decisión personal, retirarse con la satisfacción del deber cumplido o arriesgar buena parte del beneficio.
El especulador en tendencia no busca ganar siempre, sino ser golpeado pocas veces y, periódicamente, conseguir algún trade destacado que brilla especialmente en su cartera.
Ese es el modo mediante el que, curiosamente, logra batir al mercado a largo plazo; y ello pasa por sufrir muchas veces desilusiones como la de octubre. A largo plazo compensa, pero ese plazo es sólo para la gente que entiende qué tiene entre manos y persevera en la aplicación de una metodología.
Nosotros, operativamente, procuramos obrar siempre igual cuando el entorno lo permite, y por ello no vamos a cerrar la operativa tampoco esta vez mientras no tengamos señales de deterioro en tendencia; arriesgándonos a que las ganancias se esfumen en gran medida como ya nos pasó en octubre.
Lo sugerimos como consejo general; al menos mientras no se produzca una vela de vuelta en la zona de dificultad.